Este miércoles, la Secretaria General del SutNotimex, Adriana Urrea Torres, acudió al llamado de la Secretaría de la Función Pública para esclarecer las falsas acusaciones que le atribuyen y que forman parte de la campaña sucia y persecución política en su contra, por parte de la directora de la Agencia, Sanjuana Martínez Montemayor.
Contrario a las acusaciones contra la dirigente sindical, las ilegalidades cometidas por parte de la Directora de Notimex son cada vez mayores, por lo que se aprovechó la visita a la SFP para interponer una tercera denuncia colectiva en su contra, por transgredir a los derechos de los trabajadores y violar las leyes mexicanas y la Constitución, además de requerir información sobre el estatus de las más de 50 quejas y demandas que se registraron en el mismo tenor, de las cuales no se sabe nada hasta ahora.
Durante la comparecencia, en la cual estuvo acompañada de las y los trabajadores en huelga, así como de organizaciones sindicales, campesinas y movimientos sociales quienes se manifestaron afuera de las instalaciones de la SPF, la secretaria general del SutNotimex dejó en claro que durante los 18 años que lleva laborando en Notimex jamás ha cometido irregularidad alguna.
La persecución de la cual es víctima Adriana Urrea, derivó de su activismo como representante sindical, pues el citatorio de la Función Pública ocurrió a los seis meses de haber estallado una huelga en Notimex, Agencia de Noticias del Estado Mexicano, y las acusaciones por faltas administrativas menores en su contra, que nada tienen que ver con corrupción o peculado, están plagadas de graves imprecisiones, contradicciones, mentiras y hechos notoriamente imposibles.
La principal evidencia de que se trata de una persecución política, es que Notimex, como nunca anteshabía ocurrido, por instrucciones de Sanjuana Martínez, se revisaron con lupa en 2020 los viajes de coberturas periodísticas que realizó Adriana Urrea como reportera de 2013 a 2019, con el propósito de encontrar supuestas inconsistencias y faltas normativas, bajo las cuales se le pretenden fincar delitos.
Sin embargo, en su momento, ante las instancias administrativas de la Agencia y con sus superiores, Adriana Urrea hizo puntualmente sus comprobaciones de viáticos y entregó los informes correspondientes que fueron validados por las áreas a cargo, además que su trabajo se soporta con las notas informativas publicadas, por lo que en ningún momento recibió observación alguna sobre faltas.
Hay acusaciones tan burdas, como que le atribuyeron una cobertura periodística en el extranjero, la cual fue realizada por otra reportera de la Agencia. También que fue y vino el mismo día de la Ciudad de México a Irlanda. O que no terminó de entregar su reporte de la última gira presidencial que cubrió, en octubre de 2019.
