Mientras que en Estados Unidos crece la versión de que el gobierno mexicano habría aceptado una suerte de agregados laborales estadounidenses, en México los senadores de Acción Nacional exigen la comparecencia del principal negociador del llamado T-MEC, el subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Jesús Seade.
Sin embargo el funcionario del gobierno de Andrés Manuel López Obrador ya rechazó que lo firmado por México, Estados Unidos y Canadá en el protocolo modificatorio del T-MEC haya contenido “letras chiquitas”, por lo que es un “muy buen acuerdo trilateral”.
Esto a propósito de la polémica generada por la iniciativa de ley norteamericana que pretende crear cinco inspectores para certificar el cumplimiento de la reforma laboral en nuestro país.
Respecto a la iniciativa de Ley de Implementación, HR3450, presentada el viernes en el Congreso de los Estados Unidos y que fuera cuestionada por él mismo el sábado en una conferencia de prensa porque permitiría contar al gobierno de Donald Trump con agregados laborales en la embajada en México, Seade Kuri explicó que se trata de un proceso legal “que incluye los compromisos tomados y otras cosas internas, como necesidades presupuestales derivadas del tratado, el rediseño de sus instituciones, etc”.