El territorio mexicano se ha convertido en un gran cementerio de fosas clandestinas con un total de cuatro mil 92 identificadas desde 2006 a septiembre de 2020, en las cuales han sido exhumados seis mil 900 cuerpos y en otros casos un número significativo de restos humanos que no están totalmente integrados.
Esta información se dio a conocer en la conferencia mañanera del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, por parte de Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación.
Precisó que son seis estados los que concentran el mayor número de fosas clandestinas: Veracruz, Tamaulipas, Guerrero, Sinaloa y Zacatecas, que concentran el 49.5 por ciento de fosas clandestinas.
“Entre estos aquí incluimos el número de cuerpos exhumados que tenemos en total, incluimos los que están registrados en la Fiscalía General de la República que no necesariamente por ser cuerpos localizados con anterioridad se ha reportado en la entidad federativa o el municipio donde fueron encontrados. De estos, el 50 por ciento de los cuerpos se encuentran básicamente en cuatro estados: Jalisco, Sinaloa, Chihuahua y Guerrero”, explicó.
Encinas consideró que el comportamiento de esta práctica ilícita de desaparición e inhumación clandestina se registra básicamente en ocho estados de la República. “A los estados tradicionales que conocíamos como Veracruz, Tamaulipas, Guerrero, Sinaloa y Zacatecas, ahora se han sumado, lamentablemente, entidades como Jalisco, Colima y Sonora”, dijo.
En lo que va del actual gobierno se han registrado mil 257 fosas y se han exhumado mil 957 cuerpos; es decir, en estos dos últimos años hemos localizado el 30.7 por ciento de las fosas históricamente registradas y se han exhumado el 28.3 por ciento de los cuerpos que se han exhumado en su totalidad del 2006 a la fecha.
Esto obedece fundamentalmente que se han intensificado las labores de búsqueda en coordinación con los familiares, una labor que el Estado mexicano había abandonado y que por instrucciones del presidente de la República hemos asumido como una responsabilidad del Estado mexicano, hacer la búsqueda y acompañamiento de los familiares que están en búsqueda de sus familiares.
