Al entrar a la estación Cuatro Caminos, personal de vigilancia y policías auxiliares reciben a los usuarios del Metro con unos letreros en las manos que dicen “callados prevenimos el contagio” y se observa la silueta de una persona que hace una señal para guardar silencio.
Además de los cubrebocas, que son obligatorios en el Metro y Metrobús, y la sana distancia, los usuarios ahora deben viajar sin hablar, cantar ni gritar para evitar contagios de COVID-19 durante la llamada “nueva normalidad”.
La campaña, indicó el Sistema de Transporte Colectivo, se basa en análisis científicos que demuestran que una de las principales formas de transmisión del COVID–19 es a través de las gotitas de secreciones respiratorias que expulsan las personas al toser, estornudar o hablar.
Pero no todos atendieron este exhorto a viajar en silencio luego de la Jornada de Sana Distancia.