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Producción y tráfico de fentanilo en Quintana Roo y Yucatán

MÉRIDA, YUCATÁN. – Israel Canales Fuentes, Circe Viridiana Palma, Juan Méndez, Juan José Vilchis Mercado, fueron los encargados de dar el pitazo para que el Ejército mexicano y la Guardia Nacional localizara en el poblado Andrés Quintana Roo, municipio de Carrillo Puerto, en Quintana Roo, el laboratorio de droga sintética.

De acuerdo con La Opinión de México, estos personajes, servidores públicos, empleados federales y el último propietario de una óptica en Plaza Dorada, de la Ciudad de Mérida, alertaron para que dicho laboratorio de droga sintética fuera descubierto el día primero de junio del presente año. Lo irónico es que no lo hicieron porque son buenos ciudadanos, lo hicieron porque todos se dedican al trasiego de fentanilo en Quintana Roo y Yucatán, estos sujetos, al parecer laboran para el CJNG y la familia Epitacio, quienes están arraigados en Mérida desde hace décadas.

En el caso de Israel Antonio Canales Fuentes, es Agente del Ministerio Público Federal, adscrito a FEADLE y ha estado involucrado en sobornos electorales en Mexicali y otras plazas, tiene varias investigaciones abiertas en el órgano interno de FGR, una de las cuales tiene el siguiente número de indagatoria, FEAI/VISITEL/1408/2023 y una más en Estados Unidos, precisamente por el trasiego de fentanilo.

La segunda es mejor conocida como la “Poquianchis”, se trata de Circe Viridiana Palma, quien tiene su domicilio en la Calle 33 a # 416 de la colonia Pedregales de Tanlum, quien tiene varias indagatorias federales por diversos delitos, entre ellas, FED/FEMDH/FEADLE-YUC/0001197/2022, FED/FEMDH/FEADLE/1023/2022 FEA/FEMDH/1077/2022, todas radicadas en la Fiscalía General de la República.

Tiene una más por corrupción de menores y distribución de material pornográfico, que sigue activa y en la que ya se recibieron las declaraciones de dos testigos, está bajo la carpeta 60/286/2023, en la unión americana, donde ya cuenta con una alerta migratoria en el USCIS, que es el servicio de inmigración en los Estados Unidos, también tienen dos acusaciones penales una en el estado de Texas y otra en Tennessee, donde radican familiares de la multicitada “Poquianchis”, quienes también están bajo investigación de las autoridades norteamericanas.

Juan Méndez, alias la “Gorda”, compañero de labores de la “Poquianchis” en la Comisión Federal de Electricidad, parte de la célula de delincuentes, y Juan Vilchis Mercado, propietario de una óptica donde guarda drogas y otras sustancias, dicho alijo está ubicado en calle 50 #143 x 15 y 19 de la Colonia Nueva Hidalgo, dentro de Plaza Dorada, en esta ciudad de Mérida Yucatán.

Israel Antonio Canales es el encargado de darles protección legal a los demás investigados, y es el encargado de darles pormenores de cómo conducirse en sus actividades delincuenciales, también es pareja sentimental de Circe Viridiana Palma, lo mismo que Juan Vilchis, es decir, los tres mantienen una relación poliamorosa y son quienes deciden qué se hace y cómo se hace.

Utilizan al empleado Juan Méndez como pantalla para trasegar fentanilo, ya que su condición de persona del ambiente lésbico gay no levanta sospechas, sin embargo, últimamente han estado moviendo drogas en un vehículo Aveo Blanco placas ZBW802c año 2018, perteneciente a la Comisión Federal de Electricidad.

El día 9 de junio de este año, Circe Viridiana Palma y Juan Vilchis, sacaron un alijo de varios kilos de fentanilo en dicho auto, lo guardaron en la óptica de este último y de ahí a las nueve de la noche aproximadamente lo condujo a su domicilio, ubicado en calle 49B #258 x 42 y 46 del fraccionamiento Francisco de Montejo, de esta ciudad capital de Mérida, Yucatán.

El día 10 de junio la “Poquianchis” pasó de nueva cuenta por la óptica y a decir de nuestra fuente informativa, sacó el alijo y lo puso en una empresa de mensajería. Cabe resaltar que el fentanilo ya maquilado, son pastillas muy pequeñas, del tamaño de una aspirina y de un mejoral, las cuales no levantan sospechas y son muy fáciles de transportar. Los binomios caninos de las dependencias policiales aún no están entrenados para detectar el fentanilo, por eso es muy fácil que pase inadvertido.

La fuente, que revelo toda esta información, menciona que dicha célula está operando desde el año pasado, solo que el Agente del Ministerio Público Federal apenas se incorporó, pues desde octubre del 2022 venía sosteniendo una relación sentimental con la “Poquianchis”, dado que él era el encargado de investigarla y terminó por reclutarlo.

Debido a las indagatorias que hay en contra de todos estos sujetos, se desaparecieron de redes sociales, borraron, eliminaron sus cuentas y se comunican vía Signal. Este medio informativo se dio a la tarea de investigar, y efectivamente Circe Viridiana Palma Martínez, desactivó su Facebook personal el cual aparecía con el nombre de “Cir Cir” y ahora solo usa Messenger en esa plataforma.

En Instagram aparece como Mónica Solís, pero es una cuenta que tiene también en Facebook y utiliza para cooptar y reclutar niñas menores de edad, de hecho, en Instagram se puede apreciar a quienes tiene agregados, el Agente del ministerio Público Federal aparecía en Facebook como Isra Canales, y después como “nachito borrachito”, ya eliminó su cuenta al igual que la de TW, donde aparecía como @MirzhaMiguez.

El segundo amasio de la “Poquianchis”, Juan Vilchis Mercado igual desapareció su cuenta de Tw, cuya cuenta usaba junto a la “Poquianchis” para reclutar menores de edad, que eran ofrecidas en algunos casos a funcionarios de CFE y últimamente al Ministerio Publico en cuestión. Hoy en día sólo utiliza la plataforma de WhatsApp para comunicarse desde el número 9999472388, de la compañía telefónica Telcel.

Cabe mencionar que la autoridad local ha estado tolerando la operación de diversos grupos de narcotraficantes que cohabitan en Yucatán desde hace mucho y tiene pleno conocimiento de las actividades de los grupos delincuenciales en la entidad, tan así es que la DEA está investigando dicha situación y otra agencia más también ya metió las manos.

Debido a la importancia geográfica que tiene Yucatán, como se ha hecho del dominio público, el Servicio de Información del Congreso de los Estados Unidos tienen varias investigaciones abiertas de varios personajes y empresarios Yucatecos, así como de mandos medios, empleados federales, funcionarios públicos y Ministerios Públicos, los cuales están siendo investigados.

Hasta hace poco se tuvo conocimiento que ya hay la colaboración de la Subprocuraduría de asuntos internacionales, que es la que apoya a la DEA en estas situaciones y es que para la Unión Americana es un problema de seguridad nacional el fentanilo, tan así es que solo el año pasado hubo más de 70 mil muertes producidas por sobredosis de esta letal droga.

Como ya sabemos en Yucatán ya se denunció que se comercializaba junto al cristal entre los trabajadores del tren maya, y que eran precisamente empleados de la CFE quienes abrieron el negocio junto con el CJNG, lo que quedó en evidencia con el decomiso de dosis de fentanilo a un guía de turista en Chichen Itzá, quien entre otras cosas en sus declaraciones mencionó que también les vendía a trabajadores del tren maya.

Es obvio y evidente que toda esta información la tienen las autoridades y no están haciendo mucho por detener a los delincuentes, por motivos más que evidentes, sin embargo, el hacer público lo que sucede y cómo se está moviendo la plaza en Yucatán, les da a nuestros lectores una mejor idea de cómo están las cosas y la falsa paz social que las autoridades venden a la sociedad.

Lo lamentable es que las autoridades, ni federales ni estatales por lo antes comentado están haciendo mucho, se antoja difícil que la ley y la justicia alcance a esta célula de delincuentes, una de las varias que ya operan fentanilo en Yucatán y Quintana Roo.

Pero se antoja cercano que los dueños del laboratorio que delataron, si los alcancen y se cobren sus deudas y vendettas, lo que vendría de un momento a otro a calentar la plaza en Yucatán, o lo de menos, es que hagan lo que se sucede en casos donde a los sapos, como se conoce a los delatores en el ambiente de los narcotraficantes, simplemente desaparezcan del mapa o acaben en un cenote, o bajo una narcomanta, cualquiera sea el destino de los delincuentes violentara y prenderá los focos rojos en la entidad.

HISTORIAL

La producción y consumo de fentanilo –una de las drogas sintéticas más adictivas y mortales– se ha convertido en una fiebre. Exportada de China, el opioide entra a México a través de las terminales aéreas y marítimas y es importada por las amplias redes que disponen los cárteles de Jalisco Nueva Generación y Sinaloa, los más poderosos de América Latina.

Hasta hace dos años, el fentanilo era traído de China, donde se han localizado unos cinco mil sitios donde se puede adquirir; las redes de distribución colocaban la sustancia en territorio estadounidense a través de buques, pero después escogieron a México como puente para hacer llegar la droga a la frontera norte. Luego es cruzada a Estados Unidos en vehículos particulares o a través de túneles.

Ahora, la dinámica ya cambió. De acuerdo con informes consultados en la Agencia Antidrogas Estadounidense (DEA) y en la Fiscalía General de la República (FGR), el fentanilo ya se produce en México. Y a gran escala. Los cárteles de Sinaloa y Jalisco importan los precursores químicos y se elabora la droga sintética en laboratorios localizados en Michoacán, Colima, Culiacán, entre otras ciudades, donde ambos grupos criminales disponen de expertos en la producción de esa sustancia que ha causado furor entre los consumidores estadounidenses. Todo se realiza con protección policíaca y/o militar.

La razón por la que los cárteles mexicanos se han involucrado en el tráfico de fentanilo tiene una explicación: Es altamente rentable. Según datos publicados en 2020 por el diario “El Universal”, producir un kilo de fentanilo cuesta 32 mil dólares. Con ese kilo se producen un millón de dosis que, de acuerdo con cifras de la DEA, arrojan ganancias de hasta veinte millones de dólares.

En los últimos años es cada vez mayor la demanda de las drogas sintéticas, entre ellas el fentanilo; esto ha derivado en que los cárteles de Sinaloa y Jalisco hayan entrado en negociaciones con bandas del narcotráfico chinas dedicadas a la distribución de ese químico que, de acuerdo con expertos, está considerado no sólo uno de los más adictivos, sino que es mortal.

Hoy la guerra entre grupos delictivos continúa desatada, sobre todo por la presencia del CJNG que busca abrir y reforzar nuevas rutas de exportación de fentanilo y drogas que contengan este componente como el cristal o metanfetamina que ya representa un serio problema para la juventud de la zona metropolitana, entiéndase Monterrey, Guadalupe, Juárez, Escobedo, García, San Nicolás y Santa Catarina.

Esto derivó en una crisis dentro de Estados Unidos, que exigió a los países de la región latinoamericana vigilar más sus fronteras y evitar el tráfico de fentanilo. Pero en México ya se encendieron las alertas en este sentido, ya que las organizaciones chinas han escogido al territorio nacional como puente para hacer llegar la droga a Estados Unidos. Esa es la razón por la que en México ahora son más frecuentes las incautaciones de esa sustancia sintética.

El motivo por la que el gobierno de México ha procedido a militarizar todo el país; también explica por qué la Guardia Nacional ahora debe ser coordinada desde la Secretaría de la Defensa Nacional. En el fondo de todo, está la seguridad de la frontera estadounidense y sus intereses económicos en México.
AM.MX/fm

 

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