Desde hace 35 años, en una pequeña cabina radiofónica acondicionada en una de las habitaciones del No. 45 de la calle Córdoba, en la colonia Roma Norte, en la Ciudad de México, surgió la magia de llevar a la audiencia de viaje por el patrimonio cultural del país, mediante las voces de académicos, especialistas e invitados, quienes han compartido sus experiencias y vocaciones.
“El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) está de plácemes por este 35 aniversario de la cabina de radio. Y para nosotros es un orgullo ser parte de esta historia y, más aún, del brillante futuro que le espera a este talentoso grupo de profesionales con las nuevas plataformas digitales y los proyectos por venir”, señala la coordinadora nacional de Difusión del organismo, Beatriz Quintanar Hinojosa.
Uno de estos nuevos proyectos es la serie “De historias e identidades”, que girará en torno a cosas de las que gustamos los mexicanos: las tortas, el fútbol y la lucha libre; el culto a la Guadalupana o la conmemoración de la Semana Santa.
La subdirectora de Producción Radiofónica del INAH y fundadora de la cabina, Gabriela Marentes Garza, evoca sobre la renovación constante de documentos sonoros académicos y culturales, cuya iniciativa salió al aire a finales de junio de 1990, aprovechando el invaluable capital intelectual de la institución que, en más de tres décadas, ha visto ampliar su auditorio y sus voces.
El crecimiento continúa, derivado también de la presencia en plataformas digitales, como Spotify o YouTube, donde suma más de 57,000 suscriptores. Y también al salir de sus paredes, cubiertas con paneles acústicos y retratos de insignes investigadores, con el reciente proyecto de la “CabINAH”, en eventos como el INAHfest o la Feria Internacional del Libro de Antropología e Historia.
“El INAHfest ha permitido llevar la ‘CabINAH’ a Teotihuacan, Cuernavaca, Salvatierra, San Luis Potosí…, ¡Ha sido un éxito! La gente se acerca y nos comparte una canción, una leyenda o historia familiar, recetas… Ese bagaje personal es reflejo de lo inagotable que es la cultura de México”, manifiesta Marentes Garza.
La semilla se plantó gracias a la voluntad y entusiasmo del exdirector general del INAH, Roberto García Moll, y del primer coordinador nacional de Difusión, Jaime Bali West, y hoy tiene una audiencia cautiva de sus contenidos.
En cintas de carrete del Archivo Testimonial Sonoro de Personalidades están inmortalizadas las experiencias de vida de reconocidos hombres y mujeres dedicados a las áreas antropológicas y la historia: Guillermo Bonfil Batalla, Jaime Litvak, Julio César Olivé, Irene Vázquez, Alfonso Muñoz, entre muchos otros.
El jefe de Producción Radiofónica, Evanibaldo Morales Celis, menciona la continuidad de proyectos, como “Somos nuestra memoria”, el cual ha tenido varios conductores, pero que, desde 2018, tiene como entrevistador al director del Museo Nacional de Historia, Salvador Rueda Smithers, con un estilo ameno y profundo.
En tanto, el arqueólogo Luis Alberto López Wario ha estado al frente de las series “Somos nuestra memoria”, “Raíces y cimientos. Arqueología de salvamento en México” y, la aún por estrenar, “De historias e identidades”.
Entre los contenidos con mayor número de reproducciones está la entrevista con la historiadora Beatriz Cano, sobre la pandemia de 1918, que fue transmitida durante la contingencia por la COVID-19; y la realizada al profesor Eduardo Matos Moctezuma, acerca de los orígenes del pueblo mexica y sus mitos.
“Poco a poco han aumentado los escuchas. El que un programa supere las 600,000 visualizaciones no deja de ser un logro, y los comentarios –en su mayoría positivos– son un aliciente. Radio INAH nos permite aprender mucho, en la parte intelectual y humana, de lo que es el patrimonio cultural”, expresa Evanibaldo Morales, conductor de la cartelera sonora “INAH en movimiento”.
Radio INAH ha sido un proyecto en equipo y, al mirar atrás, “es que nos damos cuenta de lo que hemos sembrado y cosechado, una vastedad de documentos sonoros que son valiosos no solo para la institución en la que trabajamos, sino para el país, y en algunas ocasiones, para el mundo”, finaliza Gabriela Marentes.