Confiado en los buenos oficios del canciller Marcelo Ebrard y su buena relación con los demócratas estadounidenses, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador se resiste a dar su brazo a torcer y reconocer el triunfo de Joe Biden como presidente de Estados Unidos.
El ganador de las elecciones del vecino país del norte intentó hacer una llamada telefónica con López Obrador pero la embajadora de México en Estados Unidos, Martha Bárcena, explicó a interlocutores estadounidenses el porqué de la decisión del país de esperar a felicitar al ganador de la elección presidencial en la Unión Americana.
Por instrucciones del presidente Andrés Manuel López Obrador y del secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, la diplomática mexicana expuso que tal decisión está basada en los principios de política exterior, mismos que se consagran en la Constitución mexicana, particularmente en el principio de no intervención.